"Yapa?" Un juego sobre una realidad
“En el Perú, yapa es ese pequeño extra que se da al servir comida. En tiempos de escasez, esa palabra se convierte en una forma de resistencia.”
Por primera vez, nos metimos 2 semanas intensas con el equipo de Mr. iO Studios para crear un videojuego sobre las Ollas Comunes en el Perú. Desarrollado como parte de la Gamejam de "Latinx in Gaming" y Unity llamada UNIDOS ; el marco del "Mes de la Herencia Hispana y Latina" en Estados Unidos.

El resultado fue increíble: ¡Ganamos el Primer Puesto!

Un homenaje en forma de ritmo
"Yapa?" no busca convertir el hambre en entretenimiento. Su lenguaje es el del respeto: cada golpe de ritmo, cada plato entregado, evoca el trabajo invisible de miles de mujeres que, desde los años setenta, sostienen con sus manos una red de cuidado que ha sobrevivido a la inflación, al desempleo y al olvido.
“La olla no se apaga”, dice una de las voces que inspiran el proyecto. “Aunque a veces no alcanza, seguimos cocinando.”

Ollas comunes en Perú: cultura, liderazgo y resistencia
Más de 1.3 millones de peruanos no pueden cubrir una canasta básica. Ante ello, las ollas comunes surgieron como símbolo de solidaridad y organización vecinal. Nacidas en huelgas y crisis, dieron origen a los comedores populares en 1978. Hoy, estas iniciativas lideradas por mujeres cuentan con respaldo legal y apoyo estatal.

En un país donde la anemia infantil alcanza al 43,7 % de los niños menores de tres años y la desnutrición crónica afecta al 12,1 % de los menores de cinco, las ollas comunes son más que un gesto solidario: son una expresión viva de cultura, reciprocidad y liderazgo femenino. Actualmente, más de 4.500 ollas comunes alimentan a alrededor de 300.000 personas cada día, en un contexto donde 17 millones de peruanos viven en inseguridad alimentaria.

Cuando el videojuego se convierte en memoria
Yapa convierte ese liderazgo en ritmo. Inspirado en los años 1985, 1993 y 2008 ;tres épocas de crisis alimentarias y transformaciones sociales, el juego hace que el jugador mantenga el compás para servir platos a tiempo. No hay vidas que se pierden ni castigos: solo el eco de una verdad real.
A veces alcanza. A veces no.

En un tiempo donde los videojuegos suelen asociarse más con el escape que con el compromiso, Yapa recuerda que también pueden ser herramientas de empatía y educación. Como una capa digital sobre la realidad, el juego no sustituye la voz de las mujeres; la amplifica y difunde. Existen muchas historias que necesitan contarse y el videojuego puede ser una de las formas más poderosas de hacerlo.
Puedes jugar "Yapa?" aqui (Sólo versión web)
Por: Satoshi Waku @satoshi.waku